EL SOTE Y EL OCP

El Sote tiene 33 años de vida. Con varias ampliaciones ha llegado a transportar 400 mil barriles diarios conforme fue su diseño original que partió teniendo una reserva probada de petróleo de 1.350 millones de barriles. El OCP está a punto de funcionar. Pretende transportar 400 mil barriles diarios, pero la reserva remanente de las compañías no llega a 700 millones de barriles. No se alcanza a comprender por qué con una reserva tan pequeña planearon un oleoducto tan grande. La ruta que eligieron por Mindo y sus encantos, fue la menos indicada, comprometiendo la vida en una región admirada por propios y extraños. El OCP empezará a operar a fines de año. Tendremos dos tubos con una capacidad para transportar 800 mil barriles diarios y la producción apenas rebasa los 400 mil. Ahora el Sote opera solo con los gastos de operación que suman 50 centavos de dólar por barril. Si la tarifa que se cobra al usuario fuera de dos dólares la diferencia de 1,50 quedaría a favor del Estado. Toda la producción de Petroecuador debe transportarse por el Sote para beneficiarse de la desaparición de la alícuota de amortización. Sin embargo hay interesados en que el petróleo de Petroecuador sea transportado por el OCP. Sería un pésimo negocio para el país por barata que sea la tarifa. En principio han acordado una tarifa de 1,60 dólares por barril que Petroecuador pagaría en vez de la tarifa que solo tiene 50 centavos de gasto de operación. El Presidente de la República debe detener a tiempo estas pretensiones. OCP tiene que recuperar su inversión transportando su petróleo. El Sote tiene que transportar el petróleo de su propiedad y el petróleo que rinden los contratos de participación y los contratos de campos marginales. El nuevo crudo será de 27,5 grados API, tendrá buena aceptación en los mercados del exterior y estará apto para ser refinado en Esmeraldas y Santa Elena.