GLOBAL Y ANTIGLOBAL

Entre el 31 de enero y el 5 de febrero se reunieron en dos lugares distintos miles de delegados de todos los continentes. Unos en Porto Alegre, Brasil, y otros en Manhattan, Nueva York. Ambas reuniones tuvieron una agenda común: pobreza, terrorismo y recesión económica mundial, pero lo hicieron desde distintos puntos de vista. Mientras para los del foro económico en Nueva York, lo importante estuvo en los intereses de los países industrializados, para los del foro social en Brasil, lo importante estuvo en los intereses de los pobres y de los desplazados. Con una economía mundial en recesión es iluso esperar una tabla de salvación neoliberal que venga de las islas de la opulencia. Ahora, lo importante está en admitir que el "pensamiento único" no es posible en los tiempos que transcurren. La democracia pasa por la tolerancia, la opinión de otros, en fin, las ideas contrarias. De cualquier manera la globalización será siempre abrir las fronteras de todo el mundo, en el supuesto de que mejorarán las relaciones bilaterales.