LA DEMOGRAFIA IMPULSA LA GLOBALIZACION

Hay quienes sostienen que la verdadera causa de la globalización y del éxito de las políticas neoliberales es el descalabro de las soluciones estatales. Para otros la apertura comercial, el flujo internacional de capitales, es producto del progreso tecnológico en las intercomunicaciones. Sin desmerecer estas explicaciones, me atrevo a añadir una más: La estructura demográfica de los países. Europa y Japón son países "viejos". El porcentaje de gente joven (menor de 20 años) y niños no llega al 20 por ciento de la población. Mientras que la fracción de jubilados y por jubilarse aumenta cada día. Exactamente lo contrario sucede en los países menos desarrollados como el nuestro. Más del 50 por ciento de la población son niños y jóvenes, y mientras mayor la edad menor el porcentaje. En los Estados Unidos, gracias a la inmigración la estructura demográfica es pareja para todas las edades. Las personas de la primera y tercera edad son consumidoras por excelencia. Las de la segunda edad producen más que lo que consumen y prácticamente son las que ahorran. Estas son las fuerzas demográficas que inciden en la movilización de capitales y en los desequilibrios de las cuentas internacionales. Por otro lado, todo parece indicar que la tasas de fertilidad y las tasas de crecimiento de la población en los países en desarrollo están disminuyendo. Se calcula en que en menos de 50 años muchos países (entre ellos México y Ecuador) tendrán una estructura demográfica como la de los Estados Unidos. Cuando esto suceda los flujos de capital de los países desarrollados hacia los menos desarrollados se reducirán. Entonces, deploraremos que se haya estancado el proceso de globalización. Si no abrimos nuestras fronteras ahora, si no atraemos capitales ahora, si no damos paso a las fuerzas del mercado, si no mejoramos nuestra seguridad jurídica, en menos de 50 años podría ser muy tarde.