AUTONOMIA AL ANDAR SOBRE BASES SOLIDAS

La iniciativa del Alcalde de Guayaquil de promover un Seguro Social Municipal, mas allá de tener sobrado sustento constitucional, técnico, financiero y legal, es sobre todo responsable y con sustento moral, pues el sistema corrupto y corruptor centralizado de gestión del Estado y sus usufructuarios, se robaron el ahorro previsional del asegurado activo y pasivo presente y, dejaron desprotegidos a los jubilados futuros y endeudado al país, a los asegurados y no asegurados, con una cuenta por pagar de quince billones de dólares. Esta iniciativa, por ser de carácter estructural, debe ser apoyada por todos, sin distingo de ninguna especie. Es importante que nos mantengamos atentos de los detractores del proyecto pertenecientes a esta región, ellos deben ser sancionados. Guayaquil debe buscar soluciones estructurales a los problemas sustantivos que obstaculizan la verdadera autonomía de esta región, como tomar control absoluto de los servicios básicos, puertos marítimos, aeropuertos, carreteras; y, de la educación y la salud asistencialista. Debe exigirse que el dinero del Estado se invierta equitativamente por región, que se confiera autonomía operativa, financiera, normativa, de gestión y técnica a las oficinas regionales de los estamentos de control y apoyo del Estado, como las Superintendencias y la Contraloría, como medio para aumentar la eficiencia. Hay también que exigir a los multilaterales que abran oficinas en Guayaquil. Como para llevar a cabo todo esto, se necesita mucho dinero, y el dinero que Guayas y Guayaquil aporta por diferentes vías el sistema centralizado de gestión del estado impunemente lo distrae; todo esto debe complementarse con una reforma tributaria que deje en cada región al menos el 40 por ciento de lo recaudado en IVA, Impuesto a la Renta, IECE, Aduanas, etc.