OLEODUCTO : SI, UN HITO; LUEGO MAZAR

Con un gran aplauso se acogió la firma del contrato para la construcción del nuevo oleoducto -de crudos pesados- y se dejó constancia de dos consecuencias positivas para el país: las ventajas de la obra misma y el significado de la culminación del proceso. El aplauso fue también para el presidente Gustavo Noboa y el ministro Pablo Terán. Una inversión de US .1.100 millones de dólares, la consiguiente creación de miles de puestos, el ingreso al país de millones de dólares son razones para destacar la importancia del tema. Gustavo Noboa dijo una frase significativa. Ahora viene Mazar. Y, en realidad, es otro ejemplo de una obra importante y significativa para el país que se ha frenado tantos o más años que el oleoducto. Hablar de Mazar es fijarse una meta ambiciosa y requiere de un apoyo nacional para que se concrete. Paute la fuente principal de energía para el Ecuador puede peligrar si no se construye la presa Mazar y en este caso hay que encontrar la fórmula para la construcción con dineros del sector privado y que luego encaje junto a una obra nacional, como es Paute.