LA REFLEXION DE LOS MAGNATES
Tema(s): En: El Comercio 9 jun. 2003, p. A. 4Resumen: Reunidos en Ixtapa, México, el 24 de abril, 30 magnates latinoamericanos, entre ellos algunos de los hombres más ricos del mundo, abrieron la puerta a reflexiones distintas de las que usualmente ocupan sus agendas. Los iconos del capitalismo de la región pusieron en el tapete temas obvios pero difíciles de admitirse, como aquellos que sin una base social suficiente, sin estados estructurados, sin un mínimo de justicia y de redistribución del ingreso el capitalismo no puede enraizar, ni puede la empresa privada convertirse en un valor que articule a la comunidad. Los magnates advierten que la iniciativa privada, el comercio y la prosperidad necesitan, además de capitales y tecnología, de gente común con mínimos poderes, elementales capacidades con educación, salud, seguridad e infraestructura, y que todo eso supone redistribución del ingreso, es decir, sensatez. La reflexión de los magnates es importante no porque hayan "descubierto" una vieja verdad, sino porque muchos de ellos han vivido y practicado, hasta aquí, el capitalismo abstracto, en que la felicidad de la gente queda enredada en los balances. Es importante porque es un giro ideológico que va de la ilusión mercantilista a la terrestre realidad de nuestros pueblos, del rascacielos al rancho. El tema es que si el capitalismo no cuaja en los ranchos, y si no llegan sus ventajas al mundo del suburbio, no sirve en términos humanos. El tema está en cómo difundir en la sociedad el efecto benéfico de la iniciativa, la inversión y transformarlos, por tanto, en los pilares del desarrollo no solo de las empresas sino de los países.Tipo de ítem | Biblioteca actual | Signatura | Info Vol | Estado | Fecha de vencimiento | Código de barras | |
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Analítica de Seriada | BIBLIOTECA ECONÓMICA BCE - QUITO | El Comercio. 9 jun. 2003, p. A. 4 | Disponible |
Reunidos en Ixtapa, México, el 24 de abril, 30 magnates latinoamericanos, entre ellos algunos de los hombres más ricos del mundo, abrieron la puerta a reflexiones distintas de las que usualmente ocupan sus agendas. Los iconos del capitalismo de la región pusieron en el tapete temas obvios pero difíciles de admitirse, como aquellos que sin una base social suficiente, sin estados estructurados, sin un mínimo de justicia y de redistribución del ingreso el capitalismo no puede enraizar, ni puede la empresa privada convertirse en un valor que articule a la comunidad. Los magnates advierten que la iniciativa privada, el comercio y la prosperidad necesitan, además de capitales y tecnología, de gente común con mínimos poderes, elementales capacidades con educación, salud, seguridad e infraestructura, y que todo eso supone redistribución del ingreso, es decir, sensatez. La reflexión de los magnates es importante no porque hayan "descubierto" una vieja verdad, sino porque muchos de ellos han vivido y practicado, hasta aquí, el capitalismo abstracto, en que la felicidad de la gente queda enredada en los balances. Es importante porque es un giro ideológico que va de la ilusión mercantilista a la terrestre realidad de nuestros pueblos, del rascacielos al rancho. El tema es que si el capitalismo no cuaja en los ranchos, y si no llegan sus ventajas al mundo del suburbio, no sirve en términos humanos. El tema está en cómo difundir en la sociedad el efecto benéfico de la iniciativa, la inversión y transformarlos, por tanto, en los pilares del desarrollo no solo de las empresas sino de los países.
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