HUELLAS DEL TLC EN EL AGRO

Los efectos del Tratado de Libre Comercio con Estados Unidos en la producción agrícola y ganadera de dos países referentes abren grietas a la plataforma que proclama su conveniencia para Ecuador, según los resultados que citaron expositores del II Congreso de Lechería de Altura y del seminario 'TLC, amenaza para el agro de Los Ríos'. El presidente de la Asociación de Soyeros y Arroceros de esa provincia, Pedro López, describió el caso de México con el Tratado de Libre Comercio de América del Norte. México de productor autosuficiente pasó a gran comprador: entre 1994 y el 2002 ingresaron a esa nación más de 15 millones de toneladas del cereal por arriba de las cuotas y a estas sobre-cuotas el gobierno no les cobró aranceles. De fréjol soya, solo el 20 por ciento de los que lo producían antes del Tlcan sobrevivió pues el 98 por ciento de lo que consumen ahora es importado. En términos generales, el costo de la canasta básica de los mexicanos se ha trepado el 257 por ciento y se han perdido 1'780.000 empleos en el agro. En Chile, a tan solo un año de la firma del Tratado de Libre Comercio con Estados Unidos, Javier Magarini, de la Universidad Austral, quien participó en el Segundo Congreso de Lechería de Altura que se realizó en Quito, la describe muy similar. Según el especialista, la amenaza del TLC está sobre las pymes (pequeñas y medianas empresas), generadoras de mano de obra que el tratado no ha contemplado y mantiene su débil desarrollo tecnológico, sin líneas de crédito a pesar de su importancia laboral. En Chile, por ejemplo, las pymes están desapareciendo ya que solo pueden sobrevivir las grandes empresas, y ahí, reflexionó Magarini, uno se pregunta: este éxito, ¿a quién beneficia? Lo que se ha logrado con esto es que la juventud de las zonas rurales abandone el campo y salga a las ciudades en busca de oportunidades.