ACUERDO PETROLERO

Acaba de concretarse uno de los acuerdos en materia petrolera que habían previsto los presidentes del Ecuador y Venezuela, durante la visita que este último hiciera a nuestro país. Se trata de un mecanismo mediante el cual Ecuador entregará hasta cien mil barriles diarios de petróleo crudo, por el cual Venezuela nos devolverá la cantidad correspondiente de productos refinados, una especie de trueque en condiciones, dicen los técnicos petroleros y los economistas, favorables y oportunos para nuestro país. El primer efecto será la eliminación de los intermediarios, un factor que ha sido gravoso para el Ecuador dueño del petróleo y que significaba una dependencia frente a grupos económicos muy influyentes. La cadena doble de comercialización que drenaba divisas, al vender el crudo y al comprar derivados, se reducirá notablemente. Y este es un paso adelante. El convenio traerá otras ventajas muy importantes: la transferencia de tecnología e inversiones que tanto necesitamos en este campo. El Acuerdo abre para el Ecuador una nueva línea que dará alivio para la financiación de planes de desarrollo en materia tan importante. A esto hay que agregar el hecho de que disminuirá en forma notable, la pesada carga económica que significa para nosotros la importación de combustibles derivados del petróleo; en otras palabras, disminuirá el absurdo de ser exportadores de petróleo crudo e importadores de sus derivados, a causa del predominio de intereses de círculos económicos que han ejercido una influencia política nefasta para nuestra economía. Por ello consideramos positiva la suscripción de este documento, que seguramente será el primero, pues vendrán otros similares.