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ADVIERTEN UNA CRISIS ENERGETICA

Por: Tema(s): En: Hoy 14 abr. 1996, p. A.10Resumen: Con el propósito de contribuir con algunos elementos de juicio sobre tan delicada materia, el Centro de Estudio y Análisis, CEA, contribuye con el presente análisis. Si se analiza el comportamiento del consumo energética del país, se puede comprobar que la electricidad no representa más de 17 por ciento del total. Esto quiere decir que los hidrocarburos y la leña suplen aproximadamente 83 por ciento del consumo energético ecuatoriano. Datos de la Organización Latinoamericana de Energía (OLADE), indican que el país consumió, en promedio, aproximadamente un equivalente a 125 mil barriles de petróleo diarios en 1994. Si es que se acopla el consumo energético al crecimiento económico, se puede proyectar que para los siguientes cuatro años, habrá un crecimiento sostenido de aproximadamente cuatro por ciento anual de consumo neto de energía. Esto significa que para 1996 se puede estimar un consumo interno aproximado equivalente a 48,8 millones de barriles de petróleo (bep) anuales, o sea, unos 135 mil barriles de demanda diaria. Durante todos los gobiernos de la última etapa democrática, se han visto grandes variaciones de los precios internos y de su relación con los precios de importación (valor internacional). En 1979, la gasolina valía 17 centavos de dólar por galón, frente a un precio internacional de 55 centavos de dólar. Esta política de subvencionar los precios de la gasolina se mantuvo hasta 1992, cuando se decidió eliminar todos los subsidios a los energéticos en general. Desde el cambio de la política de precios de la energía, hasta el momento actual, se ha revertido la tendencia, por que se ha pasado de una clara subvención por parte del Estado, al cobro de un impuesto a la energía, disfrazado de una fórmula arancelaria. De esta forma, el consumidor ha dejado de recibir un subsidio y ha pasasado a contribuir al Presupuesto del Estado con su consumo de energía.
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Analítica de Seriada Analítica de Seriada BIBLIOTECA ECONÓMICA BCE - QUITO RESUM-006812 (Navegar estantería(Abre debajo)) Hoy. 14 abr. 1996, p. A.10 Disponible

Con el propósito de contribuir con algunos elementos de juicio sobre tan delicada materia, el Centro de Estudio y Análisis, CEA, contribuye con el presente análisis. Si se analiza el comportamiento del consumo energética del país, se puede comprobar que la electricidad no representa más de 17 por ciento del total. Esto quiere decir que los hidrocarburos y la leña suplen aproximadamente 83 por ciento del consumo energético ecuatoriano. Datos de la Organización Latinoamericana de Energía (OLADE), indican que el país consumió, en promedio, aproximadamente un equivalente a 125 mil barriles de petróleo diarios en 1994. Si es que se acopla el consumo energético al crecimiento económico, se puede proyectar que para los siguientes cuatro años, habrá un crecimiento sostenido de aproximadamente cuatro por ciento anual de consumo neto de energía. Esto significa que para 1996 se puede estimar un consumo interno aproximado equivalente a 48,8 millones de barriles de petróleo (bep) anuales, o sea, unos 135 mil barriles de demanda diaria. Durante todos los gobiernos de la última etapa democrática, se han visto grandes variaciones de los precios internos y de su relación con los precios de importación (valor internacional). En 1979, la gasolina valía 17 centavos de dólar por galón, frente a un precio internacional de 55 centavos de dólar. Esta política de subvencionar los precios de la gasolina se mantuvo hasta 1992, cuando se decidió eliminar todos los subsidios a los energéticos en general. Desde el cambio de la política de precios de la energía, hasta el momento actual, se ha revertido la tendencia, por que se ha pasado de una clara subvención por parte del Estado, al cobro de un impuesto a la energía, disfrazado de una fórmula arancelaria. De esta forma, el consumidor ha dejado de recibir un subsidio y ha pasasado a contribuir al Presupuesto del Estado con su consumo de energía.

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