MARCHA ATRAS

Increíble pero cierto fue la insólita decisión del Banco Central para dar por terminado el contrato de comodato que mantiene con el Archivo Histórico del Guayas y el convenio de administración con la Fundación Miguel Aspiazu Carbo, dando por extinguido tal comodato suscrito a un plazo de 99 años. Debemos recalcar que con tal decisión se pretendió que casi de inmediato se retire al A.H.G. del edificio propiedad del Banco Central donde está ubicado tan importante institución que constituye el verdadero y auténtico acervo histórico-cultural de Guayaquil y de la provincia del Guayas. Sabemos que esta institución porteña no cuenta con otras rentas por lo que realiza casi sacrificadamente el interesante trabajo intelectual que consiste en la recuperación histórica-socio-cultural de los guayasenses, lo que significa, por ende, el estudio de su identidad. Felizmente gracias al reclamo y la pujanza de los guayaquileños el señor Presidente de la República dio las instrucciones del caso al gerente del Banco Central para revertir lo acordado por dicho organismo por lo que ahora contaremos con un A.H.G. operativo.