Imagen de Google Jackets

DESPERDICIANDO EL OCP...

Por: Tema(s): En: Hoy 28 oct. 2003, p. A. 4Resumen: Luego de tres décadas, el país al fin ha duplicado su capacidad de trasporte de hidrocarburos. Curiosamente, lejos de buscar afanosamente estos nuevos ingresos anuales para el Estado por más de US 440 millones, se ha hecho lo posible por evitarlo. Podemos inventar toda clase de excusas para justificarlo. Mientras tanto, la estabilidad de nuestra economía toda, pende exclusivamente del comportamiento del precio internacional del petróleo, variable sobre la que por supuesto no tenemos ningún control. La lógica más elemental invita a buscar una manera de cubrir ese brutal riesgo de alguna manera. Para nuestra fortuna, disponemos del mecanismo que enervaría tal volatilidad: el bombear el OCP. Sin embargo, contrariando al más elemental sentido común, continuamos a la espera de que la baja de precios desencadene una severa crisis, para hacer entonces lo que bien podríamos hacer ahora.
Etiquetas de esta biblioteca: No hay etiquetas de esta biblioteca para este título. Ingresar para agregar etiquetas.
Valoración
    Valoración media: 0.0 (0 votos)
Existencias
Tipo de ítem Biblioteca actual Signatura topográfica Info Vol Estado Fecha de vencimiento Código de barras
Analítica de Seriada Analítica de Seriada BIBLIOTECA ECONÓMICA BCE - QUITO Hoy. 28 oct. 2003, p. A. 4 Disponible

Luego de tres décadas, el país al fin ha duplicado su capacidad de trasporte de hidrocarburos. Curiosamente, lejos de buscar afanosamente estos nuevos ingresos anuales para el Estado por más de US 440 millones, se ha hecho lo posible por evitarlo. Podemos inventar toda clase de excusas para justificarlo. Mientras tanto, la estabilidad de nuestra economía toda, pende exclusivamente del comportamiento del precio internacional del petróleo, variable sobre la que por supuesto no tenemos ningún control. La lógica más elemental invita a buscar una manera de cubrir ese brutal riesgo de alguna manera. Para nuestra fortuna, disponemos del mecanismo que enervaría tal volatilidad: el bombear el OCP. Sin embargo, contrariando al más elemental sentido común, continuamos a la espera de que la baja de precios desencadene una severa crisis, para hacer entonces lo que bien podríamos hacer ahora.

No hay comentarios en este titulo.

para colocar un comentario.