!ALERTA ROJA¡

El Directorio del Servicio de Rentas Internas discute en estos días dos reformas fundamentales. Por un lado, se pretende cambiar el esquema en vigencia de retención en la fuente del uno por ciento a los proveedores, por parte de los exportadores. La idea es reducir el actual uno por ciento a un irrisorio uno por mil. Por otro lado, se propone lograr un diferimiento del pago del IVA para todos los productos con 0 por ciento de derechos arancelarios. Como vemos, ambas reformas buscan promover la capacidad exportadora del país, hecho fundamental y que merece todo apoyo, pero por la vía de afectar principios fundamentales sobre los que se sostiene la estructura tributaria del Ecuador y que han sido, con tenacidad y responsabilidad, consolidados en la última administración del SRI. Si estas reformas se hacen realidad se despojaría a SRI de información muy valiosa para el cumplimiento de sus tareas de recaudación. Pero no solamente eso. Se echaría por los suelos el principio de generalidad que debe apuntalar la relación del Estado con todos sus agentes de tributación, y se quebraría el principio de que quien invierte debe asumir todos sus costos tributarios y no esperar que éstos sean subsidiados por el Estado, aún más si se trata de costos que se trasladan al consumidor. Por responsabilidad, el Gobierno de Gustavo Noboa no puede despedirse con el legado de haber iniciado la destrucción de la estructura tributaria del país. Es deber del Presidente, obligación para con el futuro del Ecuador en los próximos años, poner las cosas en orden e impedir el despropósito propuesto por sus subalternos.