¿LAS JOYAS DE LA ABUELA A SUBASTA?

Que un grupo de 87 ejecutivos del Banco Central del Ecuador (BCE) se hayan autoescogido para subirse los salarios en el orden del 90-130 por ciento es algo difícil de aceptar, incluso dentro del propio BCE. Y los responsables de ese hecho moralmente censurable tendrán que darle al país las explicaciones del caso, pues, al fin y al cabo, los recursos del BCE son también recursos de los ecuatorianos, o sea, de los contribuyentes y del pueblo en general. Pero si este es un tema censurable, ¿cómo calificar lo denunciado por Osvaldo Hurtado, en el sentido de que existen poderosos intereses económicos rondando alrededor de la cartera del BCE? Hoy, 18 meses después, los resultados están a la vista. Luego de la quiebra de buena parte del sistema bancario, algunos damnificados de oro terminaron con sus deudas en la cuentas internas del BCE . ¿Cuánto de esos US1.200 millones de deuda es obra suya? Si alguien se sienta con calculadora en mano y analiza la actual crisis, tendrá que deducir que el tema de la cartera del BCE es mucho más importante para el país que las desagradables escaramuzas salariales internas que exigen sanciones.