CADA CUAL ATIENDE A SU JUEGO

Mañana se produce un paro inusual en el país. Al Estado lo asedian desde distintos frentes. Los trabajadores no quieren saber nada de la protesta de algunas Cámaras del Litoral, pero coinciden en el momento. Los alcaldes, por su parte, tienen su propio pliego de peticiones, independiente dicen, pero dejan que al carro de la protesta se suban los dirigentes empresariales de Guayaquil. Los campesinos están lejos unos y otros, pero el cierre de las carreteras pone su grano de arena al mismo desconcierto. Todos juran que en sus intenciones no está desestabilizar al régimen, pero contribuyen desde sus contradictorias posiciones a echar leña al fuego de la ingobernabilidad. A la incertidumbre aparente del Gobierno le agregarán un poco más de incertidumbre, en estos días miércoles y jueves, cuando los trabajadores estatales pidan pago de los sueldos, al costado de las Cámaras que piden la reducción de sus puestos de trabajo. Y si las coincidencias son notables, los símbolos comienzan a parecerse.