CENTRALISMO Y DESCENTRALIZACION

Señala que en Ecuador hay dos tendencias contrarias: La de los centralistas que aspiran que todos los recursos del Estado se maneje a través del Ministerio de Finanzas, y la que quiere descentralizar todas las gestiones. En el proyecto de ley del nuevo ordenamiento fiscal, presentado con la proforma para el año 2.000, se incluye la aspiración del Ejecutivo de concretar la centralización. Esto es eliminar las preasignaciones. En teoría, podría discutirse si es bueno o no que el Estado tenga las limitaciones de las preasignaciones, por la Constitución y las leyes, que le dejan poco margen de distribución adicional al Ejecutivo, pero esa discusión hay que vincularla con realidades en países como el Ecuador, donde el fisco es un mal pagador. Para que exista algo de descentralización deben mantenerse las preasignaciones presupuestarias y garantizar la funcionalidad ordinaria de sectores y entidades descentralizadas, aun cuando su administración no sea controlada por los partidarios del Gobierno central.