BANQUEROS NO BANDIDOS

Para salir del atolladero económico hay que superar el actual modelo librecambista: especulador, concentrador y excluyente, por una opción productiva, sustentada en la participación y la equidad. Hay que fomentar la oferta, sobre bases de sustentabilidad ambiental y social, atendiendo al aparato productivo mediano y pequeño con créditos favorables, oportunos y adecuadamente dirigidos; sin descuidar la demanda interna, cuyo potencial sería ampliado con una política salarial dinámica y con reformas profundas para reducir la pobreza. Y cualquier respaldo al sector financiero pasaría por una revisión a fondo de cada caso, totalmente transparente, estableciendo posibles responsabilidades. Sería intolerable ver, una vez más, bancos quebrados y ex banqueros ricos. La situación da ya para clamar con José Martí, ¡Banqueros no: bandidos!