VIEJAS TRABAS EN LA LEY DE PROMOCION DE INVERSIONES

Hace pocos días el Gobierno expidió el reglamento a la Ley de Promoción y Garantía de las Inversiones. El documento complementa una normativa legal que desde su propia concepción por parte del Ministerio de Comercio Exterior, Industrialización y Pesca (MICIP), levantó serios cuestionamientos en diversos medios productivos. A pesar de los esfuerzos de ese ministerio por incentivar las inversiones, en el caso específico de la aplicación de esta ley, los empresarios deben enfrentar un esquema normativo adecuado más bien al régimen que tenía el país en épocas de aversión a los capitales extranjeros. El reglamento reinserta trabas en materia de registro de inversiones extranjeras y transferencia de tecnología, que fueron superados años atrás. A ello se suma la incorporación de previsiones centralistas que están alejadas de elementales principios de modernización estatal.