PUERTO UNA PRIVATIZACION A MEDIAS

Las autoridades del puerto marítimo de Guayaquil cerraron el viernes un negocio que le reportará a la institución unos US3,5 millones anuales. Se trata de contratos de arrendamiento y explotación de más de 400 mil cuadrados de áreas de patios y bodegas de la Autoridad Portuaria de Guayaquil (APG). Se firmaron con empresas ganadoras de un concurso que pagarán cánones de arrendamiento mensual de entre US0,30 y 2,03 por la utilización de cada metro cuadrado. Los recursos que recogerá la APG ya tienen un destino: aliviar la carga que le representó la liquidación de más de mil empleados, con un costo en total que entre 1993 y 1996 sobrepasó los US30 millones. Lo otro es bajar las tasas portuarias. Hasta ahora han resultado insignificantes, según el experto en materia portuaria y consultor internacional Juan Francisco Ballén. La idea del cambio tiene origen precisamente en los indicadores sobre la ineficiencia del puerto, que según un estudio de la misma APG genera elevados sobrecostos. En 1994, por ejemplo, causaba un sobrecosto de US288 por contenedor que se movilizaba por Guayaquil.