PRESUPUESTO Y EL PIB

Una de las claves para el manejo económico, reside en el diseño del Presupuesto General del Estado. Los gobiernos en general, han convertido a la elaboración del presupuesto en un instrumento para satisfacer compromisos de toda índole. El resultado de esta práctica es muy simple: los egresos crecen a un ritmo acelerado, mientras la producción nacional se mantiene estancada. Entre 1992 y 1995, los egresos del presupuesto pasaron de S/. 3,1 a 11,1 billones, es decir que se multiplicaron en más de 3,5 veces. En cambio el PIB creció de S/. 19,4 a 46 billones en el mismo período, es decir que se multiplicó en 2,4 veces. En esa situación lo elemental consiste e producir más o reducir el gasto. Otra alternativa, incrementar la producción, más sus resultados no son inmediatos. Para las condiciones actuales de la economía, la cuestión estriba en que las altas tasas de interés no estimulan a la inversión productiva, y sin ella, no hay cómo generar riqueza. El elevado costo del dinero, es además una de las consecuencias del desequilibrio fiscal que obliga al gobierno a buscar recursos a través del endeudamiento interno para pagar sueldos y otros gastos administrativos, o financiar obras públicas.