LAS CUENTAS CLARAS Y ...

Si el costo del conflicto bélico alcanza a US250 millones, las cuentas para su pago serían las siguientes: por el impuesto del 2 por ciento al avalúo vehicular, US54 millones; por el descuento de dos días de sueldo, US21 millones; por la reducción del plazo de retención de los tributos por parte de la banca privada, US6 millones; con lo cual se tendrían US81 millones. Si se considera el ahorro producido por el reajuste de la inversión pública (US166 millones), y la reducción en las inversiones de las entidades del sector público (unos US833 millones), el costo directo del conflicto estaría más que cubierto. Pero si queda algún gasto pendiente (y reservado) se podría cubrir con el aumento del precio del crudo. Además existe otra fuente de financiamiento: el control de la evasión tributaria, que se ha calculado en US900 millones para 1993. También se podría posponer el servicio de la deuda a la banca comercial que será de US250 millones en 1995. Por último, si esto no es suficiente o conveniente, el gobierno podría flexibilizar su meta fiscal. Parece que el gobierno busca, con la eliminación de las exoneraciones al IVA (que generaría unos US250 millones), reajustar su modelo económico.