La estabilidad laboral no depende de la ley

La discusión de las reformas laborales aún no arranca en la Asamblea, pero ya genera debates. Los sectores involucrados tienen cuestionamientos, entre otros puntos, a las nuevas reglas de contratación. En las cámaras empresariales existe un pronunciamiento común: la flexibilidad laboral es un motor para la generación de empleo. Que el Estado imponga los tipos de contratación, resulta incómodo. Esto por la eliminación de los contratos a plazo fijo. El artículo 3 de la propuesta plantea la frase: "el contrato pasa a ser por tiempo indefinido". Sectores como el agrícola consideran que la medida es perjudicial para sus jornadas. Por ahora, los representantes rurales prefieren esperar al trámite en el Legislativo. Allí, dicen, explicarán que la ganadería y la agricultura no funcionan con contratos pensados para las jornadas de las ciudades. El expresidente de la Federación de Economistas del Ecuador y exmiembro de la Comisión Anticorrupción, Jorge Rodríguez, coincide con el sector privado. Las normas impuestas en las reformas del Ejecutivo, añade, podrían tener un efecto negativo en el mercado.