FMI, ARMA CONTRA LAS CRISIS

El colapso financiero de México y la crisis de pagos de las naciones más pobres concentran la atención en el FMI y el Banco Mundial. La reunión de estos organismos en Washington representa la última oportunidad de discusión de esos asuntos antes de la cumbre del G-7 en Halifax (Canadá). Se espera que los líderes del G-7 analicen mecanismos para enfrentar crisis repentinas como la de México. Los ministros presentes en Washington consideraron la posibilidad de la creación de fondos de emergencia para amortiguar el impacto de esas crisis, así como la atribución al FMI de facultades de juzgado de quiebras para ayudar a los países con mayores problemas de endeudamiento. También se destacó la necesidad de que el Fondo disponga de mejores medios para conocer el desempeño de los estados miembros. La directora ejecutiva del Banco Mundial, Eveline Herfkens, afirmó que los gobiernos de los países más endeudados no pueden devolver los préstamos y que la única solución sería que los Estados donantes aumentaran los desembolsos. El director gerente del FMI, Michel Camdessus, y representantes de los EE. UU. mostraron interés en una propuesta lanzada por el ministro de Hacienda inglés, Kenneth Clarke, para pagar las deudas con la venta de reservas de oro del FMI.