LA ECONOMIA TIENE SALDO ROJO

Si hay algo de lo que no puede quejarse el presidente Rafael Correa es que prácticamente durante todo su primer mandato contó con una buena cantidad de dinero a su disposición. Los altos precios del petróleo, que llegaron a rozar los USD 140 por barril, hicieron que el país tenga un 2008 de ensueño. Si a eso se suma que el déficit comercial alcanza los USD 721,1 millones y que las remesas de los emigrantes también se han contraído, el escenario económico para el Mandatario es un reto. Pese a ello, una de las acciones con las que alcanzó mayor popularidad fue la incautación de los bienes de los ex accionistas de Filanbanco. Sin embargo, tras un año no se ha logrado vender en su totalidad para recuperar los USD 661 millones de hueco patrimonial de la entidad. Otro éxito que se le atribuye es la renegociación de los bonos Global 12 y 30. Retiró del mercado cerca de USD 3 000 millones del pasivo, con un desembolso de USD 900 millones. Aunque la negociación fue exitosa, porque el 91 por ciento de los tenedores aceptó la oferta ecuatoriana, ese pago afectó a la liquidez.