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GASTAR SI, PERO NO ASI... PUES

Por: Tema(s): En: El Comercio 22 mar. 2009, p. 8Resumen: El año pasado, el Ecuador rompió un récord: tuvimos el crecimiento más grande del gasto público en nuestra historia. Pero no siempre es bueno romper récords. A veces es malo. A veces es pésimo. El disparo del gasto público en 2008 fue pésimo porque sobrecalentó la economía, produjo un déficit externo, aumentó la inflación y, sobre todo, porque al ser un nivel de gasto que no se puede mantener en el largo plazo, aumenta la inestabilidad de la economía al reducirse. Además de todos esos problemas, ese enorme aumento nos ha traído un mal adicional. Nos ha hecho oír una retahíla de argumentaciones falaces defendiendo ese gigantesco crecimiento como algo "social", como algo "bueno para los más pobres del país", como un arma para salir de la "larga noche neoliberal". El gasto público no es malo. Puede ser muy bueno y hasta necesario. Pero justo ahora que se volvió necesario, ya no podemos aumentarlo porque abusamos de él cuando era innecesario.
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Analítica de Seriada Analítica de Seriada BIBLIOTECA ECONÓMICA BCE - QUITO El Comercio. 22 mar. 2009, p. 8 Disponible

El año pasado, el Ecuador rompió un récord: tuvimos el crecimiento más grande del gasto público en nuestra historia. Pero no siempre es bueno romper récords. A veces es malo. A veces es pésimo. El disparo del gasto público en 2008 fue pésimo porque sobrecalentó la economía, produjo un déficit externo, aumentó la inflación y, sobre todo, porque al ser un nivel de gasto que no se puede mantener en el largo plazo, aumenta la inestabilidad de la economía al reducirse. Además de todos esos problemas, ese enorme aumento nos ha traído un mal adicional. Nos ha hecho oír una retahíla de argumentaciones falaces defendiendo ese gigantesco crecimiento como algo "social", como algo "bueno para los más pobres del país", como un arma para salir de la "larga noche neoliberal". El gasto público no es malo. Puede ser muy bueno y hasta necesario. Pero justo ahora que se volvió necesario, ya no podemos aumentarlo porque abusamos de él cuando era innecesario.

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