ALGO MAS QUE SISTEMAS

El Director de Aduanas del Ecuador hizo una especie de "rendición de cuentas", relevando que en su período se habían elevado las recaudaciones en unos 400 millones de dólares respecto al año anterior, y anunció asimismo que había el proyecto de adquirir lanchas para impedir la introducción ilegal de mercaderías por lugares distintos a los recintos aduaneros. La elevación de las recaudaciones es ciertamente un síntoma, de eficiencia en la aplicación de la ley arancelaria; pero también hay que considerar que este incremento es natural dentro del desarrollo del país, porque crecen las necesidades de importación. Y en cuanto a la adquisición de equipos, está muy bien, porque esta actividad ilícita utiliza todas las posibilidades para ejercer el contrabando, aunque en el mundo entero, el matute se ha "tecnificado" y utiliza los procedimientos más modernos. Esto nos lleva a la conclusión de que el problema más allá de los equipos de control, se sitúa en el campo de la moral de los funcionarios. Y lamentablemente allí está la parte débil del asunto; no de la aduana solo, sino de toda la administración pública; no únicamente de la administración ecuatoriana, sino de gran parte de los países del mundo. Si es que no hay una rehabilitación moral en la función pública, la adquisición de aparatos de control más bien agravan el asunto, porque esos aparatos, por sofisticados que fueran, son manejados por seres humanos, y si estos se salen de las líneas de conducta normales, todo es inútil.