OLA ESPECULATIVA EN 2006
Tema(s): En: Dinero, Diario de Negocios 24 ene. 2006, p. 7Resumen: Las acciones y anuncios de múltiples sectores y personas hacen pensar que en 2006 habrá una ola especulativa peligrosa. Si sigue expandiéndose, producción, empleo, precios y la modesta estabilidad económica presente podrían verse afectados de manera que los ecuatorianos suframos un porrazo en nuestros ingresos, salarios y ahorros. En todo proceso económico es natural que exista algún grado de especulación. Cuando se sostiene en realidades y expectativas positivas, la gente invierte y produce lo que genera empleo y riqueza. Pero, cuando la especulación no tiene sustento real, se convierte en un proceso negativo de aprovechamiento de situaciones. La especulación que aprovecha espejismos, como la que sentimos, destruye riqueza, producción y empleo. Los anuncios equivocados alimentan las presiones para gastar recursos fiscales que no existen. Ello contribuye a un crecimiento de la deuda pública y del gasto fiscal. Para corregirlo, habrá que tomar decisiones económicas costosas en el futuro.Tipo de ítem | Biblioteca actual | Signatura topográfica | Info Vol | Estado | Fecha de vencimiento | Código de barras | |
---|---|---|---|---|---|---|---|
![]() |
BIBLIOTECA ECONÓMICA BCE - QUITO | Dinero, Diario de Negocios. 24 ene. 2006, p. 7 | Disponible |
Las acciones y anuncios de múltiples sectores y personas hacen pensar que en 2006 habrá una ola especulativa peligrosa. Si sigue expandiéndose, producción, empleo, precios y la modesta estabilidad económica presente podrían verse afectados de manera que los ecuatorianos suframos un porrazo en nuestros ingresos, salarios y ahorros. En todo proceso económico es natural que exista algún grado de especulación. Cuando se sostiene en realidades y expectativas positivas, la gente invierte y produce lo que genera empleo y riqueza. Pero, cuando la especulación no tiene sustento real, se convierte en un proceso negativo de aprovechamiento de situaciones. La especulación que aprovecha espejismos, como la que sentimos, destruye riqueza, producción y empleo. Los anuncios equivocados alimentan las presiones para gastar recursos fiscales que no existen. Ello contribuye a un crecimiento de la deuda pública y del gasto fiscal. Para corregirlo, habrá que tomar decisiones económicas costosas en el futuro.
No hay comentarios en este titulo.