CUANDO LAS PERAS SE CAEN DEL OLMO

La modernización del Estado sólo ha servido para descapitalizar a las empresas estatales y llevarlas al borde de la quiebra. Es el caso de Ecuatoriana de Aviación, la única verdadera privatización llevada a cabo. No ha estado de por medio en el proceso el logro de la competencia como mecanismo para lograr la eficiencia. Tampoco opera la libertad de mercado porque, al anunciar Tame la ampliación de sus rutas los socios de Ecuatoriana, los funcionarios de la empresa y del CONAM han protestado y argumentado que eso atenta contra la rehabilitación de Ecuatoriana. Y además quieren recurrir al espíritu solidario del Estado, que actúa con eficacia cuando se trata de salvar grandes empresas con dificultades, como el Banco Continental, pero que resulta sicatero para reconstruir las viviendas de los campesinos afectados por el terremoto de Pujilí.