Imagen de Google Jackets

Inflación y precios Rómulo López Sabando

Por: Detalles de publicación: Guayaquil Expreso 2015Descripción: p. 9Tema(s): Recursos en línea: En: Expreso Año 43 N° 15187 (5 feb. 2015)Resumen: La medición de la inflación es teórica, falaz y arbitraria. Realizada por tecnócratas y políticos que acomodan cifras, le echan la culpa al alza de los precios. Es lo contrario. El gasto público inflado trae el consumismo, escasez y carestía que suben los precios. Grupos de presión creen que el Estado es un mago o un dios con plenos poderes. Recurren a él para resolver sus problemas. Ningún Estado en el mundo ni en la historia, ha acabado con la pobreza vía gasto público, pero demagogos y populistas dicen que mejoran al pueblo. A su sombra nacen miles de millonarios. Como decía Irving Fisher, se instaura "La ilusión del dinero". Para aumentar el gasto público, gobiernos imprimen dinero (devalúan) con el mito de la soberanía monetaria. El único autor de la inflación es el Estado. Estimula privilegios, mercados cautivos, especulación, disminución de la oferta e ineficiencias en la producción. Dinamiza la corrupción. Los gobiernos populistas, demagogos, socialistas, estatistas, quieren disminuir la pobreza con la peligrosa herramienta del gasto público, que no produce riqueza. El trabajo diario y productivo de cada persona crea riqueza. Los impuestos, el petróleo, la falsificación de dinero (emisión) y las deudas no son ni crean riqueza. Son solo ingresos del Estado. El precio del petróleo (Dios quiera no llegue a US$ 7.00 como en 1986), sigue bajando. ¿Cómo crear riqueza en Ecuador? Con la competencia en libertad, sin paternalismos y sin el andamiaje e injerencia y poder de políticos dueños del Estado. Es la opción para mejorar el nivel de vida de la mayor cantidad de personas, al más bajo costo y en el menor tiempo posible. Con el mito de la soberanía monetaria, los dueños del Estado que reciben miles de millones de dólares lo devalúan cuando en el mundo se revalúa. Alza de precios, carestía, escasez, desempleo, hambre, inseguridad y ausencia de libertad son el resultado del arbitrario manejo de los ingresos del Estado. Este monopolio populista es perversamente empobrecedor.
Etiquetas de esta biblioteca: No hay etiquetas de esta biblioteca para este título. Ingresar para agregar etiquetas.
Valoración
    Valoración media: 0.0 (0 votos)
No hay ítems correspondientes a este registro

La medición de la inflación es teórica, falaz y arbitraria. Realizada por tecnócratas y políticos que acomodan cifras, le echan la culpa al alza de los precios. Es lo contrario. El gasto público inflado trae el consumismo, escasez y carestía que suben los precios. Grupos de presión creen que el Estado es un mago o un dios con plenos poderes. Recurren a él para resolver sus problemas. Ningún Estado en el mundo ni en la historia, ha acabado con la pobreza vía gasto público, pero demagogos y populistas dicen que mejoran al pueblo. A su sombra nacen miles de millonarios. Como decía Irving Fisher, se instaura "La ilusión del dinero". Para aumentar el gasto público, gobiernos imprimen dinero (devalúan) con el mito de la soberanía monetaria. El único autor de la inflación es el Estado. Estimula privilegios, mercados cautivos, especulación, disminución de la oferta e ineficiencias en la producción. Dinamiza la corrupción. Los gobiernos populistas, demagogos, socialistas, estatistas, quieren disminuir la pobreza con la peligrosa herramienta del gasto público, que no produce riqueza. El trabajo diario y productivo de cada persona crea riqueza. Los impuestos, el petróleo, la falsificación de dinero (emisión) y las deudas no son ni crean riqueza. Son solo ingresos del Estado. El precio del petróleo (Dios quiera no llegue a US$ 7.00 como en 1986), sigue bajando. ¿Cómo crear riqueza en Ecuador? Con la competencia en libertad, sin paternalismos y sin el andamiaje e injerencia y poder de políticos dueños del Estado. Es la opción para mejorar el nivel de vida de la mayor cantidad de personas, al más bajo costo y en el menor tiempo posible. Con el mito de la soberanía monetaria, los dueños del Estado que reciben miles de millones de dólares lo devalúan cuando en el mundo se revalúa. Alza de precios, carestía, escasez, desempleo, hambre, inseguridad y ausencia de libertad son el resultado del arbitrario manejo de los ingresos del Estado. Este monopolio populista es perversamente empobrecedor.

No hay comentarios en este titulo.

para colocar un comentario.