LO MEJOR PARA SALIR, ES NO ENTRAR

Es necesario conocer en que ámbito y con que consecuencias se aplicó la convertibilidad en Argentina. En en ese país existía hiperinflación, con un aumento del 10 por ciento diario de los precios. Y si bien se eliminó la hiperinflación, también se produjo una euforia consumista, para bien de importadores, contrabandistas, banqueros y especuladores. Aún en la bonanza inicial el modelo afectó a la producción, duplicando el desempleo del 6 al 12 por ciento. En ese entorno, el "efecto tequila" produjo una fuga de capitales de US8 mil millones, quebraron 25 mil empresas, cerraron 20 mil comercios por año, se produjo un desempleo mayor al 20 por ciento, los salarios pierden un 10 por ciento de su poder adquisitivo al año, las tasas de interés nacionales superan con creces a las internacionales, la deuda externa subió a casi US93 mil millones, el IVA está en el 21 por ciento y el déficit este año superará los US7 mil millones. Con razón recomienda Arnaldo Bocco, que vivió en Ecuador y estudió por 4 años su realidad, que lo mejor que se puiede hacer para salir de la convertibilidad es no entrar en ella.