SOTE OCP

Si todo va bien, en la segunda mitad del próximo año, el país contará con dos oleoductos para el transporte del petróleo que se produce en el Oriente: el SOTE y el OCP. La disponibilidad de dos oleoductos producirá diversos efectos favorables para la economía nacional. En primer lugar, aumentarán considerablemente los ingresos del Estado por la venta de un mayor volumen de petróleo. En segundo lugar, de terminará la mezcla de crudos, y se suspenderá probablemente la importación de diesel. En tercer lugar, se suspenderá el transporte de una parte del petróleo de PETROECUADOR por el oleoducto de Colombia. En cuarto lugar, el crudo que se transporta por el SOTE, por ser de mejor calidad, tendrá mejores precios en el mercado internacional. En quinto lugar, mejorará la contribución al fisco de las compañías petroleras privadas, por el aumento de su producción y transporte por el OCP. Seguramente las compañías privadas buscarán aumentar su producción hasta alcanzar los 450.000 barriles diarios. La gran preocupación es saber si PETROPRODUCCION estará en capacidad de producir y transportar los 410.000 barriles diarios de la capacidad del SOTE. Para alcanzar estos objetivos, no solo la empresa estatal debe desplegar todos sus esfuerzos administrativos, económicos y técnicos, sino también las empresas que suscribieron contratos para el desarrollo de los campos marginales y las asociaciones estratégicas con algunas empresas privadas.