DE TODO SE HACE BRONCA

Hay una tendencia generalizada a convertir toda discrepancia, todo criterio distinto, no en necesaria confrontación de opiniones, sino en bronca. La semana pasada, la reacción responsable de las autoridades del Banco Central del Ecuador ante la incontrolada emisión monetaria, producida, casi íntegramente, por la ayuda estatal a la banca en manos de la Agencia de Garantía de Depósitos, fue el motivo, o el pretexto, para enfrentar a su presidente con el superintendente de Bancos, quien, expresaba su inquietud por las consecuencias que tendrían en los depositantes las medidas adoptadas. En lugar de encontrar lo positivo de la preocupación de las dos autoridades y buscar fórmulas adecuadas para proteger a quienes merecen protección los pequeños depositantes indefensos se provoca la discrepancia y se agrava la incertidumbre.