SE VIENE UNA CRISIS A LA ARGENTINA

Si seguimos con detalle las cifras económicas del país en los últimos años, podemos observar con gran preocupación altos niveles de déficit en la cuenta corriente. La cuenta corriente mide el aumento de las obligaciones externas del país. Un alto déficit es uno de los indicadores que nos alertan sobre una crisis que puede presentarse a futuro. Si observamos los datos históricos de la cuenta corriente como porcentaje del PIB en países que han sufrido severas crisis económicas, notamos la existencia de altos niveles de déficit en los tres años previos a sus crisis. Argentina, México, Brasil y Corea son ejemplos de esta tendencia. Un alto déficit de cuenta corriente no es sostenible en el mediano plazo. Un constante déficit de cuenta corriente es uno de los indicadores que refleja la fragilidad financiera de la economía y nos alerta de una crisis que se avecina. Somos el único país en la región que presenta tan altos niveles de déficit. El Gobierno debe monitorear este indicador dado que para cubrirlo no tiene muchas opciones viables. El cuadro presentado no es prometedor, mientras el déficit de cuenta corriente siga incrementándose, el panorama se asemeja más a la situación argentina poco antes de su crisis. No quiero sonar alarmista. El Gobierno todavía tiene tiempo para corregir errores, pero si las autoridades de los tres poderes del Estado no entienden lo que la cuenta corriente nos exige, no nos debemos sorprender de terminar con una crisis a la Argentina.