LOS TEXTILES CHINOS DIVIDEN AL COMERCIO

Los industriales pidieron restringir, aplicando tasas arancelarias adicionales, el ingreso de textiles chinos. Los comerciantes de Guayaquil se oponen. Los primeros aducen que la mercadería que proviene de China a menor precio los perjudica. Los segundos no piensan así, y aseguran que los ítems que se importan son mínimos, necesarios y, la mayoría, no se produce aquí. Entre enero y octubre de este año Ecuador gastó 15,9 millones de dólares en mercadería de origen textil proveniente del país asiático, según el Banco Central. Fueron camisetas (con diferentes partidas arancelarias), sostenes, combinaciones y enaguas, tejidos teñidos, medias panty, hilos, ropa de tocador o cocina y trajes. El año pasado, en esos mismos rubros y en ese mismo lapso Ecuador gastó 14,8 millones de dólares. La cifra de 2005 representa el 3,6 por ciento del total de las importaciones que llagaron desde China y que totalizaron, a octubre de este año, 435,1 millones de dólares CIF (Costo, Seguro y Flete). Esas cifras son tomadas como referencia por los comerciantes locales para decir que no hay una afectación a la industria local y que, por lo tanto, ni el Ministerio de Comercio Exterior (MICIP) ni el Consejo de Comercio Exterior e Inversiones (COMEXI), deben dar trámite al pedido que los industriales hicieron el 7 del mes pasado, de imponer una salvaguardia. "Las cifras son claras, con esos montos no puede existir un perjuicio a la industria local", señala Renato del Campo, director del Centro de Cooperación Empresarial y de Tecnología Ecuatoriano-China.