LAS PENSIONES JUBILARES

Cursa en el Congreso un proyecto de Ley de aparente beneficio social, que busca fijar pensiones jubilares mínimas a favor de quienes, con sus años de esfuerzo mientras fueron trabajadores activos, sin duda merecen un trato justo y equitativo por parte del Estado. Lamentablemente, el proyecto desconoce que con la nueva Ley de Seguridad Social corresponde ahora al Consejo Directivo del IESS aumentar el valor de las pensiones siempre y cuando lo permitan los estudios actuariales de solvencia y sostenibilidad de los seguros de invalidez, vejez y muerte. Es la única manera de garantizar el financiamiento de las prestaciones de la seguridad social e ir devolviendo paulatinamente a los pensionistas el poder adquisitivo de su renta, por lo menos a los niveles de 1998, esto es, antes de la catástrofe mahuadista. Si ya entonces las pensiones jubilares se consideraban insuficientes para asegurar un digno nivel de vida, la macrodevaluación a 25 mil sucres por dólar pulverizó la economía de los ecuatorianos y puso a los jubilados en estado de virtual indefensión frente a la escalada de precios y a la especulación. De aprobarse este proyecto, los legisladores pueden estar seguros que habrán infligido un golpe tan descomunal como injustificado a las finanzas del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social.