LA CALENTURA NO ESTA EN LAS SABANAS

Instituciones públicas y empresas privadas son morosos del IESS en una suma alrededor de 400 millones de dólares hasta 1995. Esta deuda ha sido mantenida en sucres, lo cual, disminuída por la inflación desde 1979, significa que la institución ha perdido casi el doble de este valor. Al hecho anterior, la JM condenó al IESS a mantener sus fondos sólo en sucres en el Banco Central, a tasas de interés inferiores a la inflación desatada por el propio Gobierno. De no haber sucedido esto y otras más, que son desatinos de sucesivos gobiernos, el patrimonio del IESS estaría cerca a los 1.000 millones de dólares. El no pago de US329 millones del Gobierno Sixto Dahik, determinan un escamotear de obligaciones en favor de los afiliados, principalmente del Seguro Social Campesino. El atajo estaría centrado en pasar el manejo a administradores privados, como si de esta manera se eliminaría la responsabilidad frente a la pobreza y miseria del campesinado. El IESS no ha podido ejercer una facultad coactiva de cobro con su principal deudor moroso que es el Gobierno del Ecuador, porque ha cambiado de directores generales cuantas veces ha querido, poniendo en la mayoría de ocasiones a sus títeres de turno, con honrosas excepciones.