GOL EN CONTRA

Para que en su nuevo periodo la economía crezca, el presidente Correa busca inversión extranjera. Necesita crear un entorno más atractivo, y publicitarlo. Un visionario primer paso fue conceder una entrevista al diario madrileño ABC. ABC es un diario conservador muy leído por el empresariado ibérico. Caracas lo ataca continuamente por las noticias que publica sobre la salud de Hugo Chávez. El mensaje implícito es: "Chávez los detesta, en cambio yo les reconozco credibilidad, los escojo para difundir mis políticas". En el transcurso de la entrevista, el mensaje explícito del presidente es que se solidariza con España en su crisis. Pero como la consecuencia de esta es que no crece el mercado interno español, el Ecuador se abre para que las empresas ibéricas inviertan sus capitales acá y crezcan vía mayores ventas en el exterior. Buen y claro mensaje por el canal adecuado, ABC. Al mencionar que les va bien a las empresas españolas, que hay reglas claras (discutible, pero le toca decirlo), y que su gobierno no prevé estatizaciones de empresas extranjeras o nacionales, implícitamente pone distancia con Argentina, que nacionalizó el enorme yacimiento de petróleo no convencional de Repsol, Vaca Muerta (nuestra columna del pasado abril 22), y Bolivia, que acaba de nacionalizar los activos de Iberdrola, una de las grandes empresas eléctricas de España. Gol en contra. El dilema del presidente es que quiere quedar bien con Dios y con el diablo. Quiere atraer la inversión, pero no que Hugo, Cristina, Evo y peor Fidel lo recriminen. Para quienes no definen si quieren quedar bien con Dios o con el diablo, ¿cuál es el destino? ¿El purgatorio? Preguntémosles a los teólogos.